lunes, 13 de julio de 2009

Encuesta de encuestas...

¿Usted se imagina conducir por carretera, sin indicadores precisos del estado que guarda su coche? sin saber el nivel de gasolina, la presión de aceite, el nivel de aire en las llantas o la temperatura del motor… o mucho peor, ignorando todos los indicadores. Yo lo considero una especie de suicidio resultado de una actitud muy negligente.

Pues si, estimado lector, lectora: suicidio. Esto es lo que le sucedió al Partido Acción Nacional en esta contienda por no hacer un uso correcto de las encuestas, por demeritar su valor y por desestimar su utilidad.
No entendieron que el principal reclamo de las personas y de las pequeñas y medianas empresas -por cierto, los mismos que dan vida económica al país-, son recursos de apoyo provenientes del gasto público federal o del paquete económico contracíclico que tanto anunciaron desde el año pasado. Al contrario, decidieron recortar el gasto y “cuidar” las elecciones. Una lectura económica muy rígida e inflexible, pero una lectura política infame y pésima para sus intereses de largo plazo. Tampoco se trata de dilapidar recursos al más puro estilo priísta, pero sí de ejercer el gasto público de una forma más precisa y contundente.





Desde enero pasado, las principales casas encuestadoras de nuestro país pronosticaban la debacle panista. En promedio, las encuestadoras otorgaban una ventaja de 10 puntos a favor del PRI.
Partiendo de estos datos, durante la jornada electoral tuvieron tiempo suficiente para remontar la desventaja y preparar una campaña propositiva, entonces decidieron polarizar al electorado, sacar al ejército a las calles y poner entre la espada y la pared al ciudadano: o apoyas la lucha del presidente y del ejército contra la delincuencia, o te conviertes en cómplice de los malos.

Es cierto que al final de la contienda, en promedio, a nivel nacional, la ventaja del PRI sobre el PAN se recortó a 5 puntos. No se equivocaron. Todas las encuestadoras fueron precisas. GEA – ISA fue la única que dio ventaja de 2 puntos a Acción Nacional a finales de mayo, sin embargo, precisando nuevamente, estos datos solo nos mostraban la tendencia a nivel nacional, por circunscripciones y, erróneamente, los panistas asumieron que en cada localidad, en cada región, en cada colonia y en cada barrio del país, los números debían ser iguales. Un error de lectura todavía más grave que al principio.
Encuestas al cierre de Junio 2009
De acuerdo a los resultados finales de la elección, no hay hilos negros por descubrir, no hay nada de qué quejarse ni porque fabricar culpables. En una competencia hay ganadores y perdedores. Los ciudadanos que decidieron abstenerse de salir a votar, tampoco tienen porqué ser factor, pues hubo una participación razonablemente homogénea con respecto a las elecciones intermedias recientes (votó el 45% de los ciudadanos). No así los anulistas que deben ser tomados en cuenta para bien del futuro democrático del país.
Los panistas desestimaron las encuestas, no atendieron el reclamo ciudadano, no ejercieron su influencia económica desde las delegaciones federales que hoy ostentan, y no respondieron a las expectativas ciudadanas más comunes: los niveles de desempleo se dispararon, y padecemos una crisis económica severa. Eso es lo que los ciudadanos calificaron en la elección.

No hay comentarios.: