lunes, 12 de octubre de 2009

Contraste entre los especialistas en economía y los consumidores.

Hay un evidente contraste entre las expectativas del futuro inmediato de la economía mexicana por parte de los especialistas en economía y los consumidores de nuestro país. El ambiente es de incertidumbre.

Según los datos que arroja la reciente encuesta del Banco de México a 31 especialistas en economía del sector privado, la expectativa para nuestra economía es que a partir del tercer trimestre de 2009 comienza su recuperación, muy lenta, eso sí, pero al fin se moverán los indicadores en forma positiva; es decir, para lo que resta del año, no prevén una mayor caída en el tercer y cuarto trimestre, los cuales se mantendrán en -6.81 y -3.74%, respectivamente. Por lo que el saldo del PIB anual al cierre de 2009, permanece anclado en una caída de -7.2%, igual que la encuesta del mes anterior.


Los analistas basan su pronóstico en la incipiente recuperación que mostró Estados Unidos y las economías más desarrolladas del orbe en cuanto a los pedidos manufactureros y la estabilización financiera parcial de sus instituciones bancarias. Es decir, la etapa de pánico ya pasó para los países desarrollados gracias a la oportuna intervención de los programas contracíclicos desplegados por sus gobiernos. Pero viene una etapa de reajuste que es conocida como la etapa “W”.


En este sentido, contrasta la percepción de los consumidores mexicanos de “a pie”, esos que, como usted o como yo, constituyen el grueso del consumo privado en nuestro país. Al mes de septiembre, el Índice de Confianza del Consumidor en México registró 81.9 puntos, sin duda, una recuperación respecto a los meses anteriores; en tanto que, el índice de Confianza de los Analistas Económicos se ubicó en los 110 puntos, un dato que resulta sumamente optimista y contrasta respecto al pesimismo generalizado de la población por el desempeño de nuestra economía.




Entre los factores que en la actualidad, a juicio de los analistas, obstaculizan el crecimiento económico en México, destacan cuatro:


1) La debilidad del mercado externo y la economía mundial

2) La ausencia de cambios estructurales en México

3) La debilidad del mercado interno

4) La política fiscal que se está “instrumentando”


Desde mi óptica, considero que el principal obstáculo para nuestro crecimiento es tratar de resolver nuestros asuntos económicos desde una lógica política y partidista, desde una perspectiva asistencialista que, efectivamente, otorga votos, pero no resuelve la pobreza, ni crea incentivos a la generación de riqueza.

Mientras sigamos anclados en el discurso del “bien común” y “rescate de los pobres” y sigamos postergando decisiones coyunturales como lo es: reducir privilegios a sindicatos, monopolios públicos y privados; mientras posterguemos la reforma fiscal por motivos políticos, seguiremos siendo espectadores en un mundo globalizado. Por lo pronto, como país, hace tiempo que ya nos rebasaron Brasil y Chile.


En este contexto, es comprensible que la expectativa acerca del futuro inmediato de nuestra economía, sea de “incertidumbre” por parte de los consumidores.

Leonardo Alvarez

1 comentario:

Unknown dijo...

No por nada Brasil es la sede de los próximos juegos olímpicos y Chile no se queda atrás siendo una de las economías mas desarrolladas de Latinoamérica.

Solo quisiera aportar un comentario:

Ayer fue un economista a la FECA por eso de las conferencias y habló (entre otras cosas) acerca de que los salarios en México son muy bajos por lo cual no nos podemos dar una vida decente como sucede en los países ricos, es muy evidente que el salario mínimo ni siquiera cubre las necesidades básicas y lo que él sugiere es que para esto cambie se necesita mayor productividad.

Y ese es el problema de siempre, es muy fácil decir lo que se debe de hacer o sugerir y siento que esas sugerencias no van más allá de, o como dices echarme un buen choro del bien común y de que soy bien Robín Hood.

Es como lo de la reforma fiscal, nadie esta de acuerdo, es un atentado para la soberanía nacional y si de por si los pobres….pero eso si, nadie es capaz de proponer una mejor alternativa y todos contra Carstens y Calderón y total que haber si un día se aprueba y por lo pronto quitamos 3 secretarías, quitamos 10,000 empleos, ahí haber como le hacen y el presupuesto de esas secretarías se los damos a los pobres, hay mira el Gobierno que buena onda es.

No estoy diciendo que la conferencia haya estado mal, al contrario, lo que pasa es que todo se queda en expectativas y en un haber que pasa, y es muy cierto, seguimos siendo espectadores de un mundo globalizado que, a como vamos pues no vamos a cambiar de butaca.

Saludos.