La ocupación y el empleo en México y Durango (Marzo 2009)

Durante marzo los indicadores de ocupación y empleo ya no muestran una tendencia a la baja tan drástica como en los meses anteriores. Si bien es cierto que no hay mejoría sustancial en la generación de empleos respecto al 2008, la caída ya no es tan pronunciada.

Así lo consigna el INEGI en sus Indicadores Oportunos de Ocupación y Empleo del 22 de abril de 2009. Las cifras indican que en marzo de este año 57.3% de la población de 14 años y más en el país tuvo el estatus de “Población Económicamente Activa”, es decir, se encontraba disponible para trabajar, y que, de éste porcentaje, 95.2% estuvo ocupada durante el mes. Lo cual ubica “sorpresivamente” la tasa de desocupación nacional en 4.76%, proporción aún mayor a la que se presentó el año pasado cuando se ubicó en 3.80%.

En Durango, el comportamiento del empleo tuvo un ligero repunte. Según datos del IMSS al 31 de marzo de 2009, los trabajadores afiliados entre eventuales y permanentes se incrementaron en 927 trabajadores respecto del mes de febrero de este año, ubicando la cifras en 173 mil 281 trabajadores asegurados al IMSS. A pesar de este ligero repunte, la crisis económica sigue manifestándose en nuestra entidad, ya que hemos perdido 5,611 plazas de trabajo para una caída de 3.41% respecto del mes de marzo de 2008.

No es gratuito que siendo vecinos y dependientes del comportamiento del consumidor norteamericano, los mexicanos -y los duranguenses- estemos padeciendo los efectos de la baja en el consumo sobre nuestros productos exportados. Por eso las cifras de empleo en este nivel. Por ejemplo, el último dato sobre producción industrial en México arroja que se contrajo 13.2% en febrero, siendo el sector de la industria manufacturera el más afectado con una baja del 16%, seguido de la industria de la construcción que retrocedió 11%.

En Durango, se padece directamente en nuestra incipiente industria automotriz (Empresas como Yazaki, Sumitomo, TAD y Leoni, que recientemente abrió sus puertas seguramente son de las que más están padeciendo en esta crisis). De ahí que es sumamente importante que el rescate financiero de la industria automotriz sea una prioridad para los Estados Unidos y toda la cadena productiva de autopartes en el mundo.

En este sentido, y a pesar de que las autoridades locales se empeñan en minimizar los efectos del desempleo en la entidad, las cifras a nivel internacional, nacional y local muestran un estancamiento que no podemos evadir por decreto. No es que insistamos en ser pesimistas, pero deben aceptar que hay crisis y que, eso sí, se están realizando esfuerzos por hacerla menos dañina a la población, de ahí que sean loables programas como Durango Solidario, el seguro de desempleo, las becas para estudiantes, entre otros. El problema es ¿Hasta donde serán capaces de aguantar esta política populista de subsidios? Si los ingresos públicos y la recaudación afectará las arcas de los estados sobre todo en esta época de crisis. Por tanto, los subsidios no son una alternativa eficiente económicamente hablando, pero sí es un asunto eficaz en el plano político. Dicho de otra manera, los subsidios garantizan muchos votos y el apoyo a las Pymes no. Yo me preguntaría: ¿Y las Pymes para cuando?

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