domingo, 25 de octubre de 2009

¿Por dónde comenzar?

Excelente pregunta.

No hay una sola respuesta eficiente posible, pero...hay acciones coordinadas (varias respuestas) que pueden llegar a ser eficientes en varios aspectos: laboral, energético, fiscal y gasto, por citar algunos ejemplos practicos.

A partir del decálogo presentado por el Presidente en su tercer informe de gobierno, esperábamos buenas discusiones, buenas políticas; una mayor competencia política que redundara en nuestro beneficio.

Al parecer ya se comenzó, pero como siempre, con los sesgos políticos de siempre.

Luz y Fuerza del Centro
Paquete Fiscal "Ley de ingresos"

¿Por donde comenzar?

Los políticos deben escuchar a los ciudadanos.

Ya se decidieron por el tema fiscal, ojalá lo destraben pronto y decidan correctamente. Una reforma fiscal que obviamente recaude impuestos (aunque nos duela), pero que sea de una manera que no lesione demasiado a la clase media, que facilite la recaudación y que sea justa: homogénea para todos.

Los impuestos generalizados al consumo es la vía.

Los impuestos a la producción (en medio de una crisis económica) ampliarían la recesión: nadie en su sano juicio invertiría en nuevos empleos, al contrario.

Todos los ciudadanos consumen; no todos generan empleos.
Si todos pagaramos IVA, en todos los productos, aumentariamos automáticamente la base tributaria; sólo a los profesionistas y a las pequeñas empresas es castigar a un núcleo de la Población Económicamente Activa.

Bueno, un domingo inmerso en la depresión y con "nuevo horario" no me ha dado para mucho.

Leonardo Alvarez

viernes, 23 de octubre de 2009

“…Nos obligaron a votar…”

“…Nos obligaron…”, “…la culpa es de los panistas y de Hacienda….”

“..no tuvimos opción.."…la casa se nos estaba cayendo…”
Jorge Herrera Caldera, Diputado Federal por Durango
 en programas televisivos locales.

Sin palabras. No podemos defender lo indefendible. Ahí están las declaraciones, ahí están los hechos. Y lo peor es que los panistas encabezados por el mismo Cesar Nava, le endosan la culpa al PRI de la misma forma. Mientras tanto y como siempre ¡¡¡nos volvímos a joder los de siempre!!!


Los Diputados –y cualquier representante político elegido por votos- se supone, son nuestra voz en el Congreso. Y les aseguro que gran parte de los mexicanos no estarían de acuerdo con lo que los diputados hicieron el lunes pasado. Lo más triste es la manera en la que se justifican, se desdicen, se disculpan.

Por si no se acuerdan todos los Diputados de Durango que acaban de tomar posesión en el cargo, en su reciente campaña nos dijeron, prometieron, aseguraron y casi se hincaron en nuestras puertas: Con tu voto fortalecerás al PRI en el Congreso, y los priístas SÍ sabemos gobernar. Somos un nuevo PRI. Estaremos gobernando para ustedes… ¿Y…qué pasó pués…?

¿Firmaron o no la iniciativa?
¿Son mayoría, sí o no?
¿Deciden en el Congreso, sí o no?
¿Con una pistola, los obligaron a firmar?
Si tanto lamentan la propuesta ¿Porqué no la rechazaron?
¿No que los priístas mejorarían la propuesta para promover el empleo y el crecimiento económico?

Por la poca congruencia y menor convicción mostrada departe de nuestros legisladores, es por lo que se refrenda una posición real, sistemática y recurrente entre los ciudadanos: Rechazo a la política.

Peor aún, los ciudadanos -por lo menos como yo- nos oponemos totalmente a legisladores agachones, timoratos, con sentimientos de culpa y que culpan de todo a otros, sin reconocer y explicar con entereza la difícil situación por la que pasa nuestro país.

Y el asunto de fondo es la lucha por el poder. El PRI siente que está a un paso de recuperar el poderío que perdió hace nueve años y, desgraciadamente, nos lo están demostrando: no apoyarán ni harán ninguna propuesta que beneficie la segunda mitad del gobierno de Calderón, aún y cuando ello significaría recibir un país en ruinas, con fuertes conflictos sociales y con una sociedad cansada y frustrada por tanto fracaso.

Ganar todas las gubernaturas posibles en 2010, primero, y recuperar los pinos es la consigna para el PRI. Con los agachismos mostrados, lo veremos...

Mientras, para Calderón es tratar de gobernar con decoro lo poco que le queda del sexenio. Salvar una segunda parte de forma por lo menos digna, en medio de un Estado Mexicano debilitado política y económicamente; con precariedad fiscal; a merced de los principales partidos políticos y con un notable abandono y ausencia de cuadros y militantes panistas con talento y liderazgo para solucionar los problemas.

De aprobarse la Ley de Ingresos en la Cámara Alta, tal como está, evidentemente que no se resolvería ningún problema de fondo en materia fiscal, al contrario, aplazaríamos la recuperación, no se crearán empleos y se generaría una mayor incertidumbre y desesperación entre la ciudadanía y los empresarios. Para los fatalistas, lo que sigue son estallidos sociales. Toco madera...

La cuestión aquí es a quién endosarle el costo político. Todos los partidos harán lo propio: quejarse, argumentar que fueron obligados, que fueron engañados, que era urgente decidir, que no hubo otra opción. Lo cierto es que todo ha resultado una gran farsa.

No podemos defender lo indefendible. Ahí están las declaraciones, ahí están los hechos. Y lo peor es que los panistas encabezados por el mismo Cesar Nava, le endosan la culpa al PRI de la misma forma. Como siempre ¡¡¡nos volvímos a joder los de siempre!!!


Leonardo Alvarez

jueves, 22 de octubre de 2009

Incentivar la informalidad…y el desempleo

La propuesta de “Ley de Ingresos” votada por nuestros ilustres Diputados, incentivará la informalidad y la evasión, y no la generación de empleo y una mayor productividad.



Desgraciadamente nos espera un panorama complicado: un estado mexicano económica y políticamente débil; una disminución permanente de la producción del petróleo y una interminable y voraz carga tributaria para las personas físicas y las pequeñas empresas.


La miscelánea que va camino al senado como propuesta de “Ley de Ingresos” no resuelve de fondo el problema de la debilidad fiscal, y más, cuando el mismo estado se empeña en fomentar los subsidios y las transferencias como principal política de combate a la pobreza.

No estoy contra los programas que mitigan la pobreza cuando éstos resultan “socialmente rentables”; pero, me queda clarísimo que cada peso invertido en una PYME multiplicaría el dinero que se otorga para programas sociales de subsistencia. Hay evidencia empírica que comprueba que, “A más programas de protección social, más se fomenta la evasión, porque son incentivos a la informalidad” y “más impuestos a la producción generan menores empleos” Los empresarios cautivos, los de siempre, necesitan un respiro.

Una estrategia fiscal que amplíe la base tributaria y a la vez recaude más impuestos de forma justa y sencilla, se obtendría homologando IVA en alimentos y medicinas. Ello permitiría quitar de tajo el ISR para las pequeñas y medianas empresas y los impuestos innecesarios a la producción y la tecnología. Pero lo que más deprimido me tiene es que sigan subestimando las cifras de desempleo.


Según datos preliminares de la ENOE que generó el INEGI durante septiembre de 2009, 59.4% de la población de 14 años y más en el país se considera económicamente activa –algo así como 46.7 millones de personas (mdp) en condiciones de tener un empleo-, de ellos, hoy, solo 93.5% trabaja formalmente –algo así como 43.7 mdp-; lo que significa que al mes de septiembre de 2009 existan por lo menos 2.9 mdp desempleadas en nuestro país, resultado de tener una tasa de desocupación de 6.41%.

A nivel local la situación es un tanto más preocupante por el incipiente desarrollo empresarial que tenemos.

Según los registros del IMSS, a pesar de que somos de los pocos estados que aún y con la crisis mantenemos un saldo positivo de 1,172 empleos, medidos entre agosto y septiembre; y por encima de los 2 mil, si hacemos un corte entre enero y septiembre de este año; aún con este saldo positivo, nos mantenemos muy por debajo de los registros de 2007 y 2008; debido a que la base productiva de nuestra población depende de los presupuestos públicos y la mayor parte del empleo proviene de la burocracia estatal, federal y municipal.







Visto desde otro ángulo, en septiembre 2009, registramos 173 mil 623 trabajadores asegurados entre permanentes y eventuales en el IMSS; comparado a tasa anual, perdimos 3,068 empleos respecto al mismo mes de 2008.



En este contexto, en términos de inversión privada para México:
¿Cuál cree que sea el efecto de la miscelánea fiscal votada en el Congreso?....


En lo que concierne a Durango, ¿Cómo es que nuestros diputados van a traer más recursos si el presupuesto federal será raquítico en el 2010?

La respuesta, seguramente, es que no estamos dentro del mismo barco. Los diputados navegan rumbo a las elecciones del próximo año y del 2012; y los ciudadanos: al naufragio. Tal parece que los priístas quieren asegurar el fracaso del panismo en el poder a costa de México.


El panorama es muy desalentador. La propuesta de “Ley de Ingresos” votada por nuestros “ilustres” Diputados, incentivará la informalidad y la evasión, pero no la generación de empleo.

Leonardo Alvarez

lunes, 19 de octubre de 2009

Sin "incentivos" para una mejoría industrial...

México requiere reactivar urgentemente el mercado interno, y para ello, dependemos de las decisiones que se tomen en materia económica entre el Ejecutivo y el Legislativo. Lamentablemente, no hay incentivos para pensar positivamente.



Para muestra, el INEGI publicó esta semana los resultados sobre la Inversión Fija Bruta que se mide entre el sector empresarial de nuestro país. El indicador refleja la intención de modernización y adquisición de tecnología departe de nuestros empresarios, los resultados son desastrosos: medida a tasa anual, la Formación Bruta de Capital Fijo se contrajo (-)14.1% en julio del presente año con relación al mismo mes de 2008.

El rubro más afectado es la compra de maquinaria y equipo nacional e importado que se contrajo (-29%). Ello es debido a la drástica caída en las ventas de automóviles nuevos en Estados Unidos, pero también en nuestro país. Lo que desacredita el programa de deschatarrización iniciado por la Secretaría de Economía recientemente; hoy, las personas no piensan en bienes duraderos sino en bienes de consumo inmediato: comida, vestido, salud, como prioridades.


Y ante el inminente cambio en el patrón de consumo de las economías desarrolladas, sobre todo la norteamericana, se aprecian dos “amenazas” inmediatas para el sector industrial mexicano: por un lado, los norteamericanos buscarán mayor rentabilidad y beneficio en sus inversiones, y seguramente elegirán: CHINA, INDIA o BRASIL; y por otra parte, los empresarios mexicanos, se mantendrán colapsados por la baja competitividad y altos costos de transacción de nuestra economía: sindicatos, altos costos de energía (luz, agua), impuestos, y mercado interno deprimido.


En este contexto, también con evidencia estadística del INEGI pero al mes de agosto, la Actividad Industrial descendió ( 7.3%) en términos reales con respecto a 2008. Aunque no se es una caída tan drástica como en Julio, la baja intensidad del consumo se refleja en la producción industrial. (Ver Grafica 4).



Destaca la caída a tasa anual en el sector manufacturero de ( 10.8%); y también el sector de la Construcción que retrocedió ( 7.8%) en el octavo mes de 2009 con relación al dato obtenido en igual mes de 2008.





Mientras las economías desarrolladas salen de la crisis, diversifican sus mercados, reducen sus costos…; en nuestro país seguimos “atorados” con el presupuesto 2010 y por cuestiones políticas se nos va escapar una excelente oportunidad de ingresar en la corriente de la recuperación mundial del próximo año.


México requiere reactivar urgentemente el mercado interno, y para ello, dependemos de las decisiones que se tomen en materia económica entre el Ejecutivo y el Legislativo. Lamentablemente, no hay incentivos para pensar positivamente.

Leonardo Alvarez
leonardo.alvarez@prodigy.net.mx

Calderón vs PRI: quién gana en la segunda mitad.

En términos futboleros, Calderón le va ganando al PRI dos goles contra cero en esta segunda mitad.


Se pude decir que en el primero tiempo el gobierno de Calderón fue vapuleado por todos los ciudadanos. Las elecciones intermedias así lo demuestran: el PAN perdió la mayoría en el Congreso; el equipo económico, y en general, su gabinete han sido cuestionados por su ambigüedad, por su poca eficacia y por ser incapaces de “proponer” las reformas estructurales que son necesarias para cambiar nuestro país. Eso fue en el primer tiempo.


A pesar de ello, con todo y la crisis económica, el catarrito y la influenza, la popularidad del presidente se mantiene muy por encima de lo que todos pudieran vaticinar. Es atípico, pero medido en encuestas serias, Calderón se mantiene en el 65-70% de aceptación ciudadana y el argumento es que no es el único culpable de todos nuestros problemas. Algo en lo que deben poner mucha atención sus detractores políticos.


En este contexto, durante el inicio de esta segunda mitad, la propuesta del paquete fiscal de Calderón (primer gol) y el reciente decreto de liquidación de Luz y Fuerza del Centro (LyFC) (segundo gol); aunque lo duden, constituyen un revulsivo que ha fortalecido la credibilidad del Presidente y del poder ejecutivo en general. Es algo así como la “segunda oportunidad” para el presidente.

En primer lugar, respecto al paquete fiscal, aún y cuando es contrario a lo que realmente necesita nuestro país para generar empleos y sanear las finanzas públicas, por orientarse a recaudar impuestos de los empresarios y no vía el consumo, ha sido un desafío que no ha contestado el PRI (y ningún otro partido) de manera clara, objetiva y sin dogmas populistas de fondo. El PRI ha centrado su estrategia en denostar la propuesta de la SHCP y formular un tajante “No al IVA en alimentos y medicinas”, pero nada más: nada de fondo, nada serio y contundente; “NADA” es lo que sabemos del PRI respecto a la propuesta fiscal. Esto ha generado un ambiente de duda que ha sido favorable para Felipe Calderón y, a pesar de que cayó en la primera mitad, sigue de pié, y como no tiene nada que perder, se ha vuelto un competidor peligroso, agresivo, envalentonado.


En segundo término, el tema de LyFC es algo muy similar. La gente ve muy bien la liquidación de LyFC, una empresa paraestatal ineficiente y “modelito” heredado de los gobiernos del pasado (entiéndase priístas) y que, además, su sindicato está ligado al perredismo más radical. Esta maniobra constituye otro revulsivo que fortalece la imagen del presidente y del poder ejecutivo.


Y es que la verdad Calderón no tiene otra opción. Se la tiene que jugar con todo durante el tiempo que le queda como presidente. Los ciudadanos quieren resultados y mediáticamente estos asuntos lo fortalecerán de cara a las próximas elecciones estatales. Es así como ha puesto en un enorme dilema al PRI: apoyar o no las propuestas de Calderón. Comportarse como oposición “sistemática” o ser propositivos.


Por lo pronto, mediáticamente el efecto de LyFC ha sido importante, y aunque siguen los cuestionamientos sobre la necesidad de realizar las mismas acciones contra el SNTE, PEMEX, IMSS y otras de las instituciones y organizaciones sindicales emblemáticas del priísmo más rancio -hay que decirlo claramente-, el gobierno de Calderón ha dado un primer gran paso demostrando “algo” de lucidez contra uno de los principales obstáculos a la competitividad de nuestro país: los grupos rentistas. Y está claro que no hará ningún movimiento contra otro sindicato hasta no consolidar la liquidación de LyFC.

Si el PAN quiere seguir gobernando, o aspira a gobernar decorosamente en México, tiene que convencer a la ciudadanía de que por lo menos intentó realizar los cambios que se requieren. Morir en el intento.


Y si el PRI quiere regresar en el 2012, también necesita convencer a los ciudadanos de que se trata de un “Nuevo PRI”, un partido “socialdemócrata” que sí sabe gobernar, que promueva una economía abierta pero con solidas bases sociales, responsables, quitándose los dogmas populistas de gobernar bajo el amparo de la quimera del “bien común” o la lucha de “los que menos tienen”. ¿Será?



En términos futboleros, el segundo tiempo de este partido pinta como para “Juego del Siglo”. Por lo pronto, Calderón le va ganando al PRI dos goles contra cero en esta segunda mitad.

Leonardo Alvarez
leonardo.alvarez@prodigy.net.mx

lunes, 12 de octubre de 2009

Contraste entre los especialistas en economía y los consumidores.

Hay un evidente contraste entre las expectativas del futuro inmediato de la economía mexicana por parte de los especialistas en economía y los consumidores de nuestro país. El ambiente es de incertidumbre.

Según los datos que arroja la reciente encuesta del Banco de México a 31 especialistas en economía del sector privado, la expectativa para nuestra economía es que a partir del tercer trimestre de 2009 comienza su recuperación, muy lenta, eso sí, pero al fin se moverán los indicadores en forma positiva; es decir, para lo que resta del año, no prevén una mayor caída en el tercer y cuarto trimestre, los cuales se mantendrán en -6.81 y -3.74%, respectivamente. Por lo que el saldo del PIB anual al cierre de 2009, permanece anclado en una caída de -7.2%, igual que la encuesta del mes anterior.


Los analistas basan su pronóstico en la incipiente recuperación que mostró Estados Unidos y las economías más desarrolladas del orbe en cuanto a los pedidos manufactureros y la estabilización financiera parcial de sus instituciones bancarias. Es decir, la etapa de pánico ya pasó para los países desarrollados gracias a la oportuna intervención de los programas contracíclicos desplegados por sus gobiernos. Pero viene una etapa de reajuste que es conocida como la etapa “W”.


En este sentido, contrasta la percepción de los consumidores mexicanos de “a pie”, esos que, como usted o como yo, constituyen el grueso del consumo privado en nuestro país. Al mes de septiembre, el Índice de Confianza del Consumidor en México registró 81.9 puntos, sin duda, una recuperación respecto a los meses anteriores; en tanto que, el índice de Confianza de los Analistas Económicos se ubicó en los 110 puntos, un dato que resulta sumamente optimista y contrasta respecto al pesimismo generalizado de la población por el desempeño de nuestra economía.




Entre los factores que en la actualidad, a juicio de los analistas, obstaculizan el crecimiento económico en México, destacan cuatro:


1) La debilidad del mercado externo y la economía mundial

2) La ausencia de cambios estructurales en México

3) La debilidad del mercado interno

4) La política fiscal que se está “instrumentando”


Desde mi óptica, considero que el principal obstáculo para nuestro crecimiento es tratar de resolver nuestros asuntos económicos desde una lógica política y partidista, desde una perspectiva asistencialista que, efectivamente, otorga votos, pero no resuelve la pobreza, ni crea incentivos a la generación de riqueza.

Mientras sigamos anclados en el discurso del “bien común” y “rescate de los pobres” y sigamos postergando decisiones coyunturales como lo es: reducir privilegios a sindicatos, monopolios públicos y privados; mientras posterguemos la reforma fiscal por motivos políticos, seguiremos siendo espectadores en un mundo globalizado. Por lo pronto, como país, hace tiempo que ya nos rebasaron Brasil y Chile.


En este contexto, es comprensible que la expectativa acerca del futuro inmediato de nuestra economía, sea de “incertidumbre” por parte de los consumidores.

Leonardo Alvarez

Foro de análisis del paquete económico en Durango

Son dos las conclusiones "serias" que podemos extraer del “Foro” de análisis del paquete económico realizado en nuestra ciudad el 5 de octubre pasado: la discusión es política, ratonera, de poco alcance económico y con la intención de cuidar las próximas elecciones para gobernador y, por supuesto, para presidente de la República en 2012; y en segundo término, comprobamos la poca capacidad de contrapeso de nuestros empresarios y cámaras empresariales. Ese es el dibujo del “Nuevo Polo de Desarrollo Económico en el Norte de México”.


Mientras en otros estados, regiones y países el rumbo del desarrollo va marcado por el peso de la actividad empresarial y de la sociedad civil, en el nuestro, para nuestro pesar y por una herencia “histórica” del pasado, el rumbo es marcado por los líderes políticos, los sindicatos, y las pugnas partidistas. Esa es la condena a la que estamos destinando nuevamente a nuestros hijos y nuestros nietos, lamentablemente.


Lo que vimos el lunes pasado fue un refrito del discurso populista, retrograda y sin sentido de lógica económica de parte de los legisladores. Lo triste del asunto es que no tienen empacho en aceptar un cargo para realizar los “cambios que la sociedad requiere” para el “bien común”.
No hace mucho, en las encuestas de salida, en las peticiones de los ciudadanos se registraban (incluso se siguen registrando) dos problemas que nos están azotando de manera inmisericorde: el desempleo y la seguridad pública.

Hoy, en términos de riqueza y generación de empleo, este momento es una oportunidad de oro para cambiar aquellos arreglos institucionales que, precisamente, son lo que nos tienen sumidos en la improductividad, en excesiva burocracia, en programas que subsidian la pobreza y que nunca van a terminar de erradicarla por que no incentivan la generación de riqueza. Un programa social, además de destinar recursos públicos a los pobres, crea burocracia: ¿Qué tan eficiente es el gasto burocrático de SEDESOL y SEDESOE, por ejemplo? Es rentable políticamente, pero me quedan muchas dudas de su impacto en la erradicación de la pobreza. No se si las balas pagan los patos….

Para incrementar el crecimiento económico de México, lo importante, lo prioritario es arreglar las finanzas públicas. Aquellos ingenuos que piden más gasto público, mayores niveles de deuda y mayor intervención del gobierno se han olvidado que el petróleo no da para mucho; que EUA no quiere más migrantes por su crisis; que hay una enorme evasión y elusión fiscal precisamente porque los empresarios no están dispuestos a pagar tantos impuestos; y que la única oportunidad que tenemos es impulsar nuestro mercado interno. No es generando cargas impositivas a la producción.

Si los priístas pretenden regresar a los pinos en 2012, tienen que vendernos un verdadero cambio, una verdadera renovación moral y política, tienen hoy una oportunidad para demostrarlo. ¿Qué pretenden administrar cuando lleguen al poder? ¿No es este el momento de hacer un cambio fiscal que, incluso, les beneficie en el mediano plazo? ¿No será un costo político para Calderón…?
La realidad es que los priístas están cuidando las elecciones a gobernador del próximo año en todo el país. Les da miedo que, como primera fuerza en el Congreso, los ciudadanos les cobren una factura que es del Poder Ejecutivo. Y aunque ellos digan, argumenten y se quiten la responsabilidad, ellos son parte fundamental de las decisiones de gobierno. ¿No criticaron a Calderón por su incapacidad de respuesta? ¿No pudieron en duda de los funcionarios del poder ejecutivo, precisamente por timoratos? ¿No criticaron la minimización de la crisis con el “catarrito”? Hoy, aunque lo eludan, la pelota está en su cancha.

La respuesta de Calderón ha sido clara, precisa, con números y con propuesta. Es insuficiente, es contraria a lo que la ciudadanía requiere, incluso va contra lo que Calderón propuso en su discurso como candidato presidencial; sin embargo, en estricto sentido, es una propuesta para poner a prueba a los priístas con un claro sentido de psicología inversa. No soy fan de Calderón y mucho menos de los panistas, debo aclararlo, pero hoy han hecho, quizás, la mejor estrategia para la guerra. Y la respuesta es en su mayoría responsabilidad del PRI. ¿No que sí saben gobernar?

En lo que respecta al liderazgo empresarial en nuestra entidad, pues da pena y da tristeza. ¡¡¡Que lamentable nivel de empresarios tenemos!!!


Comparsas del gobierno, aplaudidores; son unas vedets o edecanes del gobierno. Lo mismo inauguran tomas de agua potable, que pavimentos; los ves en las firmas de convenios, en las tomas de protesta y cuando por fin, en un evento como el Foro de Discusión de la Reforma Fiscal, cuando tienen la oportunidad de exigir a los legisladores que se pongan a trabajar a favor de la generación de empleo, lo único que hicieron fue denostar al Poder Ejecutivo y la propuesta del presidente… reproducen lo que los mismos ponentes argumentaron por horas y horas, sin sentido de la crítica, sin objetividad. Para no dañar a los priístas. Bonita calidad de “empresarios”, ejemplo de liderazgo en nuestra comunidad….


Hay dos conclusiones serias que podemos extraer del “Foro” de análisis del paquete económico realizado en nuestra ciudad el 5 de octubre pasado:


No sirvió porque la discusión del paquete económico es política, ratonera, de poco alcance económico y con la intención de cuidar las próximas elecciones para gobernador en el país y, por supuesto, para presidente de la República en 2012.

Tampoco sirvió por la poca capacidad de contrapeso de nuestros empresarios y cámaras empresariales: aplaudidores, vedets y edecanes del gobierno en turno.


Lamentablemente, ese es el dibujo del “Nuevo Polo de Desarrollo Económico en el Norte de México”: Durango.


Leonardo Alvarez
leonardo.alvarez@gdinnovaciones.com.mx

lunes, 5 de octubre de 2009

La recuperación tardará…

La recuperación de la economía mexicana será paulatina, más bien lenta y al ritmo que impongan los pedidos manufactureros norteamericanos. En el contexto interno prevalecerá la incertidumbre sobe el paquete fiscal que se estará discutiendo en el Congreso, por lo que nos esperan tiempos de “zozobra” hasta entonces no queden claras las reglas del juego para empresarios e instituciones públicas.


Analistas privados mantuvieron en agosto sin cambios sus expectativas para la economía de México y esperan este año una contracción del 7.2% en el PIB, al cierre de 2009.

En este contexto, en su informe sobre política monetaria del primer semestre del año, Banco de México prevé una gradual recuperación de la economía estadounidense en la segunda mitad del 2009, pero con efectos hasta 2010, junto con el desvanecimiento de los eventos temporales emanados de la recesión y, “sugieren”, que la economía mexicana podría empezar a registrar un cambio de tendencia a partir del tercer trimestre de 2009, pero una recuperación hasta 2011.

Y es que, a pesar de que las medidas contracíclicas que se anunciaron a principios de año, inoportunas e insuficientes, por cierto, la actividad económica ha permanecido en un nivel precario sostenida por la obra pública que los tres niveles de gobierno mantienen vigentes. Un indicador clave en este sentido es el Comportamiento del valor de producción de las empresas constructoras.

Según datos de la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras que publicó INEGI el 30 de septiembre, el valor de producción generado durante julio de 2009 mostró una reducción anual de -7.1% en términos reales, derivado de las menores obras relativas a Edificación y a “Otras construcciones”. Por su parte, se acrecentaron las asociadas al Transporte; Electricidad y comunicaciones; Petróleo y petroquímica, y a las de Agua, riego y saneamiento. Como se podrá observar, eminentemente obra pública que se sostiene gracias a los presupuestos públicos.Por ello, en lo inmediato, es sumamente importante la labor de los Diputados en torno a la discusión del paquete fiscal que está próximo a discutirse. No solamente tienen en sus manos la responsabilidad de incentivar el empleo, sino provocar una cascada de recursos para continuar y, en su caso, generar aquellas obras de infraestructura que deben, por lo menos, equilibrar el mercado laboral de los estados de la república como el nuestro.


La recuperación de la economía mexicana será paulatina, más bien lenta y al ritmo que impongan los pedidos manufactureros norteamericanos. En el contexto interno prevalecerá la incertidumbre hasta entonces no queden claras las reglas del juego para empresarios e instituciones públicas.

Leonardo Alvarez